Por Antonio Amaya Vidal
El Senado mexicano discutió una reforma para ampliar las capacidades de la Clave Única de Registro de Población (CURP), un código alfanumérico que funciona como registro individual para todas las personas, sin importar su edad o nacionalidad, que residen en México.
La iniciativa impulsada por los representantes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) pretende incluir una fotografía y huellas dactilares en la CURP, una modificación que añade datos biométricos que acompañarán a la clave y que fungirá como identificación oficial.
La nueva CURP elevaría su estatus al de documento de identificación oficial, con el mismo valor que la credencial para votar, el pasaporte o la cédula profesional.
Un trabajo que ya había leído por parte del Mtro. Gustavo Ortiz Barrera, donde él propuso echar a andar un Carnet Único de Identidad en la República Mexicana, en su trabajo hizo remembranza de los Documentos de Identidad en el país y de los documentos que se usan en otros países.
El proyecto de ley contempla la organización del Registro Nacional de Población (RENAPO) en tres: el Registro Nacional de ciudadanos, el Registro Nacional de niñas, niños y adolescentes; y el Catálogo de extranjeros residentes.
Estipula que la vigencia máxima del nuevo documento de identidad será de 15 años y deberá renovarse tras cuando esté deteriorada o cuando los rasgos del titular cambien y no se correspondan con su fotografía.
El proyecto de ley ha recibido críticas desde organizaciones como la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), que considera que el documento que servirá para identificarse “esconde graves riesgos para los derechos humanos, tales como la vigilancia masiva del Estado o la exclusión al acceso a servicios públicos”.
La Red también advierte que con esto se deja abierta la posibilidad de incluir otros datos biométricos en la CURP con foto, el riesgo de vulnerabilidad de los datos, que serán resguardados por la secretaría de Gobernación, ante una filtración o un ataque informático.
También se ha mencionado que es un golpe al Instituto Nacional Electoral, puesto que con la creación de la nueva identificación se desplazará el funcionamiento de la credencial para votar.
Lo preocupante para el INE es que muchas personas no votan y solamente sacan la credencial para presentarla en ciertos trámites, por lo que al tener otra identificación pues el Instituto realmente trabajaría en conseguir que los mexicanos participen y muestren que tan convencidos están con los representantes políticos.
Eso es importante porque aunque tenemos el Presidente más votado en la historia de México, fue gracias al ejercicio de casi la mitad de los mexicanos y ¿Qué pasa con los mexicanos faltantes? Porque al final Andrés Manuel López Obrador y lo demás representantes gobiernan para todos los mexicanos.
Mientras que la apatía, los malos perfiles, la falta de propuestas, el trabajo nulo para el convencimiento, y otras circunstancias hacen que sean pocos los mexicanos que ejerzan su Derecho y obligación de votar.
Debemos seguir al pendiente de lo que sucede en nuestro país y que se hace para el beneficio de los mexicanos, siempre teniendo apertura y criticando de manera objetiva lo que se hace.
Antonio Amaya Vidal
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