
Chihuahua.- Semanalmente el Gobierno de los Estados Unidos deporta hacia Chihuahua un promedio de 450 indocumentados, la mayoría de países de centro y Sudamérica, mismos que se quedan incluso a vivir en el Estado, de manera ilegal y sin que el Instituto Nacional de Migración haga algo.
Lo anterior fue informado por la gobernadora Maru Campos luego que el pasado viernes fueran encontrados más de 340 inmigrantes que estaban resguardados en una vivienda ubicada en la colonia Vistas Cerro Grande.
Por tal motivo adelantó que las autoridades de seguridad solicitaron al delegado del Instituto Nacional de Migración, Pedro Alcalá para que comparezca ante la mesa de seguridad para que informe del actuar en el tema de migrantes.
Asimismo, la mandataria estatal dijo desconocer el número de inmigrantes que tienen antecedentes penales debido a que son atribuciones única y exclusivamente del Gobierno Federal, quien no está actuando al respecto.
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